“Gracias al gobernador expandí mi negocio en beneficio de Caparo”

Esmeralda Rujano, beneficiaria del Fomdes

Cumplidos los requisitos, inmediatamente le fue aprobado un crédito a través del Fomdes

Santa María de Caparo, enero 28 (Especial OCI). Los merideños son conocidos por “lo echados para adelante”, por su capacidad de crecimiento tanto laboral como espiritual y, para Esmeralda Rujano, el emprendimiento de su negocio no se hizo esperar gracias a una visita del gobernador Ramón Guevara al municipio Padre Noguera, de esas que siempre realiza acompañado por su equipo de trabajo. Rujano aprovechó la oportunidad para acercársele, conocerlo en persona y —con papel en mano— le planteó la idea que tenía de adquirir materia prima que le permitiera expandir la producción del oficio al que ha dedicado gran parte de su vida.

Se trata de una mujer comprometida con su trabajo, con su familia y con una vocación notable por el arte de la costura desde que tenía 12 años de edad. Ya universitaria, graduada en diseño de modas, expresó: “Gracias a Dios, una vez que llegaron al pueblo de Caparo, un grupo de funcionarios y el gobernador les entregué una carta en la que le solicitaba que me ayudaran con un crédito y, pasado 22 días, ya tenía una respuesta positiva”.

Desde luego no era el mejor momento para emprender en un país que atraviesa una grave crisis económica, pero en lugar de acobardarse, Esmeralda recaudó todos los requisitos que le solicitaron en el Fondo Merideño para el Desarrollo Sustentable (Fomdes), ente adscrito al Gobierno regional, con la firme intención de obtener un valioso crédito, que inmediatamente le fue aprobado.

Debido a la distancia que separa este importante municipio de la ciudad capital (seis horas de carretera, aproximadamente), funcionarios del Fomdes, bajo lineamientos de los directivos, le depositaron directamente los recursos a su cuenta bancaria, acción que le ahorró gastos en traslado, alimentación, hospedaje, entre otros detalles.

Comprado el material necesario comenzó a desarrollar sus primeros productos, que —por cierto— son variados. Rujano se dedicó a la confección de atuendos para damas y niños, así como uniformes escolares y deportivos de altísima calidad.

Hoy día, esta dama ejemplar contribuye con su municipio a través de obsequios, como uniformes para niños de bajos recursos, por medio de la coordinación de los maestros de la escuela que funciona en la localidad y, para otros, ofrece la venta de estas piezas a precio solidario.

“Estoy muy feliz, estoy muy contenta con el gobernador y el esfuerzo que hace porque, gracias a su ayuda, mi familia tiene alimentación, mis hijos tienen vestimenta; arreglo mi casa y cubro mis necesidades”, agradeció. /Gilson Rojas